Siempre tendremos debilidad por William, el primer campesino lo bastante valiente y romántico como para acompañarnos en este viaje.
El padre de William, Gerónimo, nació a finales de los años 50 en Igualero, un pequeño pueblo de La Gomera.
Decidió embarcarse en una auténtica aventura y viajó a Venezuela en un velero.
Más tarde regresó para casarse con su amada esposa en Pastrana, y después pasaron más de 50 años juntos en Venezuela.
William nos habla de la gran finca que poseían, de la variedad de árboles y frutos que cultivaban, incluidas las plantas de café.
Gerónimo amaba Venezuela, pero siempre mantuvo una estrecha relación con La Gomera.
Iba y venía, cruzaba el Atlántico y compraba tierras para un posible futuro de su familia en la isla.
Este futuro se hizo realidad: con el paso de los años, los miembros de la familia empezaron a establecerse de nuevo en la isla y a cultivar las tierras que Gerónimo había adquirido a lo largo de los años.
Cuando hablas con Gerónimo, William y su hermano Wilfredo, puedes percibir el constante sabor nostálgico: una vez en Venezuela, añoran La Gomera, y en La Gomera añoran Venezuela.
En cuanto a los viejos tiempos de la isla, William puede contarnos historias sobre las abuelas que tostaban café en Barranco Santiago. El verano pasado, tuvimos la oportunidad de probar por primera vez los granos de café finamente tostados de William, y sabes qué: podías sentir la nostalgia en cada sorbo.
